El Idealismo alemán es una escuela filosófica que
se desarrolló en Alemania a
finales del siglo XVIII y
comienzos del siglo
XIX. Surgió a partir de la obra de Immanuel Kant en
los años 1780 y 1790, vinculado estrechamente con el Romanticismo,
la Ilustración y
el contexto histórico de la Revolución francesa y
las posteriores Guerras Napoleónicas. Los
principales pensadores del movimiento fueron, además del propio Kant,Fichte, Schelling y Hegel. Los
tres últimos reaccionaron fuertemente al libro Crítica de la razón pura de
Kant. También pertenecen a la escuela filósofos de talla menor, como Jacobi, Schulze, Reinhold y Schleiermacher.
Contexto: En filosofía,
el término idealismo designa
las teorías que —en oposición al materialismo— sostienen que la realidad
extramental no es cognoscible tal como es en sí misma, y que el objeto del
conocimiento está preformado o construido por la actividad cognoscitiva. Las
distintas variantes de idealismo postulan distintos principios que modelan y
conforman nuestra imagen del mundo de una manera determinada; la entidad en sí
de lo real permanece en principio incognoscible, aunque la reflexión permita
aproximarse asintóticamente a un conocimiento más refinado, en las teorías del
idealismo subjetivo o trascendental.
En el caso de las teorías
del idealismo objetivo, esta doctrina epistemológica se complementa con la
teoría metafísica de que el objeto conocido no tiene más realidad que su ser
pensado por el sujeto; mediante la autoconciencia de éste, la verdadera esencia
del objeto se desvela como la actividad subjetiva de pensamiento como algo real
y lo no abstracto. Tal definición corresponde en concreto a Kant. No obstante
Kant es al mismo tiempo materialista, pues contempla la existencia del mundo
exterior, independientemente del hombre, cognoscible para éste, aunque no en su
totalidad: la «cosa en
sí» es para Kant un residuo del materialismo. El objeto del
conocimiento es conocer y ello no es una actividad exclusiva del hombre.
El idealismo alemán
Kant provocó en Alemania un impacto notable. Pero no
es posible explicar el idealismo alemán únicamente como un simple desarrollo de
la doctrina kantiana. Hacia finales del siglo XVIII y comienzos del XIX, la
derrota ante Napoleón plasmaba un desmembramiento político secular. Alemania
estaba dividida y atrasada social y económicamente respecto a Francia e
Inglaterra. Fitche escribiría en 1808 un vibrante llamando a la nación alemana,
en tanto esta no existía como tal y debía hacerse a sí misma con libertad para
comenzar su propia historia.
El idealismo alemán, recoge esta preocupación por la
libertad y la unidad frente al extranjero, esa pasión por la nación alemana,
por analizar el concepto de pueblo (volkgesit). Los movimientos nacionalistas
coinciden con este clima intelectual. Los temas principales de los filósofos
idealistas serán entonces:
1.
Desarrollo de la doctrina
kantiana: Kant fue, en efecto, el punto de partida. Iniciador
y maestro, no escapó a la crítica ni fue seguido fielmente. Pero no todo se redujo
a él.
2.
Preocupaciones religiosas:
aparece un espíritu heterodoxo de carácter místico o panteísta. En el idealismo
se plantea el problema de la relación entre lo finito y lo infinito, la
relación entre filosofía y religión.
3.
Interés por el mundo clásico:
en la madurez de Goethe y en la mayoría de los romántico. Es un referente
permanente para Hegel.
4.
La estética:
Lo bello, adquiere como categoría, una importancia relevante, ya Kano se había
ocupado de estudiarla. Schiller habría dicho: "Para
resolver en la experiencia el problema político es preciso tomar el camino de
lo estético, porque a la libertad se llega por la belleza".
5.
La dimensión histórica
6.
El romanticismo:
La pasión por el infinito, la fusión con la Naturaleza, la identificación de
filosofía, poesía y religión, la fuerza creativa del hombre, da a lugar una
interesante cooperación en la cual los poetas se inspiran en los filósofos.
7.
Carácter teórico:
los desarrollos teóricos del idealismo no conducen a revoluciones sociales o
políticas.
Capitulo 10
Filosofia de una historia
La filosofía de la historia es la rama de la filosofía que
estudia el desarrollo y las formas en las cuales los seres humanos crean la historia.
Puede, en algunos casos, especular con la existencia de un fin u objetivo teleológico de
la historia, o sea, preguntarse si hay un diseño, propósito, principio director
o finalidad en el proceso de creación de la historia.
Las preguntas sobre las
cuales trabaja la filosofía de la historia son diversas y complejas. Algunas de
ellas podrían ser: ¿Cuál es el sujeto filosofía sujeto propio del estudio del
pasado humano? ¿Es el individuo?
¿Son las organizaciones sociales, la cultura,
o acaso la especie humana por entero? Yendo aún más allá de estas preguntas
clásicas, algunos filósofos modernos han introducido un nuevo concepto,
sosteniendo que la historia ha dejado de ser el estudio de unidades, de hechos,
pasando a ser el estudio de una compleja totalidad, que comprende no sólo las
acciones humanas pasadas y sus consecuencias visibles, sino que incluye un
sinnúmero de factores en su contexto, como las relaciones humanas, las
corrientes de pensamiento, las motivaciones particulares, y, tal vez el factor
más recientemente incorporado y que más ha revolucionado este campo de la
filosofía, es el de los pensamientos, acciones, relaciones y motivaciones de
aquel individuo que escribe la historia, esto es, del historiador.
Como escribió Edward Hallett Carr en
su libro ¿Qué es la historia?:
«Solía decirse que los
hechos hablan por sí solos. Es falso, por supuesto. Los hechos sólo hablan
cuando el historiador apela a ellos: él decide a qué hechos se da paso, y en
qué orden y contexto hacerlo».
¿Qué es la historia? -
Editorial Seix Barral, S.A., Barcelona 1965 - 3ª ed., Pág. 15
Según otra concepción, la
de R. G.
Collingwood, por ejemplo, precedido también
por Benedetto
Croce, quienes sostienen que el pensamiento de los
agentes históricos es un concepto fundamental de la investigación histórica,
caben las preguntas:
·
¿Hay algún tipo de pautas que puedan encontrarse a través del
estudio del pasado humano, por ejemplo ciclos o idea deprogreso?, ¿O acaso no
hay más pautas o ciclos que los que creemos ver?
·
¿Existe el progreso y su antítesis en la historia? ¿Cuáles son, en
tal caso, sus respectivas direcciones? ¿Y cuál es la fuerza directriz de ese
progreso, de existir?
No debe confundirse la
filosofía de la historia con la historiografía, que es
el estudio de la historia en tanto disciplina académica, ni con la historia de la filosofía,
que es el estudio del desarrollo de la filosofía a través del tiempo.
Historia de la disciplina
Júpiter y Tetis. Obra de Jean Auguste Dominique Ingres.
Tetis, tras la cólera de Aquiles, suplica a Zeus para que éste permita que los
troyanos adquieran ventaja. Las obras de Homero,
como la Iliada, responden a una mezcla entre historia y mito, en la que la
intervención divina es parte de los hechos de los hombres.
La filosofía de la
historia nació en el s.
XVIII. Tradicionalmente se le atribuye a Voltaire que
fue el primero en acuñar el término para una obra escrita por él en 1765 y
que firmó como Abate Bazin. Sin embargo, el término fue utilizado unos siglos
antes por Jean
Bodin enMétodo
para el conocimiento fácil de la historia, donde califica a Filón de Alejandría como
a un philosophitoricus (filósofo de la historia). También se
admite que Giambattista Vico fue
el auténtico creador de la disciplina en su Principios de ciencia nueva.
Voltaire entendía por
filosofía de la historia una disciplina crítica, por lo que trata de explicar
los acontecimientos pasados por medio de principios razonables con el fin de
que "la luz" de la razón elimine todo el fanatismo y
las supersticiones irracionales
que había en la historia.
En el s. XIX, Hegel le
dio un sentido más amplio a la filosofía de la historia y diferenciado a lo
considerado por Voltaire. Él fue el primero en incorporar a la Universidad de Berlín esta
disciplina. Para Hegel la filosofía de la historia hay que entenderla como una
historia global o universal. El sentido de la disciplina de la historia sufrirá
un cambio en la escuela positivista con Leopold von Ranke. Para él
eran el gobierno de las leyes generales y universales que rigen el mundo y que
deben ser relatados por la historia como una ciencia empírica.
La respuesta a por qué no
surge antes del XVIII esta disciplina es debido a que los filósofos de otras
épocas se han centrado en otras cuestiones, en la Antigua
Grecia por
la física,matemática, etc. En la Edad
Media por
la teología y
más tarde en las ciencias naturales y
finalmente los filósofos sintieron la necesidad de reflexionar sobre la
historia en el siglo XVIII y que cuyo objeto era el pasado. Esta historia
plantea una serie de problemas que se dividen en cuatro apartados:
·
La naturaleza de la historia: gira en torno a la posibilidad de
elaborar un método de lo que podemos llamar ciencias, es decir, es susceptible
de plantear problemas capaces de ser resueltos.
·
El objeto de la historia: son las acciones pasadas de los hombres
del pasado.
·
El método de la historia: es la interpretación de los testimonios,
que le permite al historiador responder y analizar en base a los signos dejados
por el pasado.
·
Valor y sentido de la historia: el saber histórico nos permite
conocer mejor al ser humano, ya que la mejor forma de conocernos, es estudiando
nuestras obras.
La concepción de la
filosofía de la historia es inseparable y depende de la concepción de la
historia, y por tanto, la comprensión del objeto está condicionada por la
interpretación que hace la filosofía de la historia. Tuvo una interpretación
ilustrada, resultado de una concepción renacentista de la historia, que a su
vez es el precipitado de fenómenos de laAntigüedad y
el Medievo.
Para los griegos la
historia es el conocimiento que se transmite mediante investigación, no por
transmisión antiquísima, como el mito.
Es investigación, indagación, interrogatorio de un testigo ocular, y el
resultado de dicho interrogatorio.
Ιστορ,
es un testigo árbitro que puede actuar como juez y puede aclarar lo que ocurrió.Ιστορεω,
es el verbo que significa investigar, indagar, por lo que semánticamente
significa indagación, y ha pasado el término a la mayoría de las lenguas
occidentales a partir del latín historiae.
Los romanos entendían la
historia igual que los griegos, como demuestra Tácito,
que utilizó el término historiae cuando hablaba de la época que el
mismo había vivido y las que son anteriores a él, y no puede observar
personalmente. Los llama Annales, por lo que no representaba la narración de
hecho del pasado. En la época romana se empleraron annales y crónicas.
En el Renacimiento se
establecen las bases para elaborar un tipo homogéneo de literatura histórica
que se le puede llamar historia. En esa época es cuando la historia se abra a
los sucesos del pasado y surja el germen de la historia científica.
A partir de ese momento se
desarrollará un criticismo ingente de la historia, sobre todo en el s. XVIII,
donde se entenderá la historia de dos formas: por un lado a los acontecimientos
hechos por el hombre (res gestae); y el reconocimiento mental de estos, cognitio (res memoria). Para ellos no sólo
existe la realidad histórica sino el conocimiento o
estudio de dicha realidad, es decir, la historia se convirtió en ciencia.
A partir de esta doble
concepción, la historia planteó dos problemas a la filosofía: uno de tipo ontológico y
otro epistemológico.
La res gestae planteó problemas ontológicos, pero si
nos referimos al segundo significado, serán de tipo epistemológico.
Los de tipo
epistemológico, son los problemas planteados por la historia en cuanto a un
modo de ciencia. Un ejemplo sería el de aclarar si la historia es un
conocimiento inmediato o no. El conocimiento histórico es ideográfico.
Las leyes de la naturaleza rigen también la historia. También se crearon
categorías históricas y se planteaba qué tipo de verdad es la verdad del
conocimiento histórico.
La filosofía del
conocimiento histórico se ocupará por tanto de la realidad histórica (res
gestae) y la historiografía (res memoria).
No hay comentarios:
Publicar un comentario